lunes, 16 de diciembre de 2013

Capitulo 38

Max me pidió tiempo y eso era lo que le estaba dando. Después de muchas noches llorando pensando en el daño que le había hecho a ese increíble chico, me di cuenta de que tampoco yo tenía toda la culpa de su sufrimiento. Le explique mis veces porque ya no sentía lo que un día me hizo enamorarme de él y ya no podía hacer mas, intentaría saber de el atreves de amigos pero  por el momento sabia que lo mejor era no verle, el mismo me lo pidió así.

Aunque me encantase estar sola en mi apartamento de Nueva York, mi tiempo a solas no duro mucho. Volvíamos a la carretera por motivos de trabajo y esta vez mi novio me acompañaba.

-          Quiero hacer todas las películas a tu lado, así cuando nos toque hacer promoción podemos sentirnos como estrellas del rock en pleno tour
-          Pero eso lo puedes hacer sola
-          No es lo mismo recorrer América con Cassie a hacerlo contigo. A ella no puedo hacerle ciertas cosas mientras conduce

En ese momento mi cabeza no pensaba con claridad. Por suerte no nos paso nada, pero con lo nervioso que puse a Miles y que yo obviamente no tenia visibilidad de la carretera pudimos haber tenido un accidente con el coche.

-          Las mejores cosas en la vida ocurren de forma inesperada
-          No has podido decirlo en mejor momento
-          Me estas tentando mucho y al final voy a terminar parando en una gasolinera para echar uno rápido
-          -levante la mano- estoy a favor

Que era un viaje de 3 horas a Philly sin una parada para tener un poco de sexo en el coche? Nada.

-          Donde estáis? Ha llegado todo el equipo y no dejan de preguntar por vosotros
-          El trafico Cassie
-          En una hora tenéis que llegar al hotel si o si. Para otra vez coger un maldito avión, os lo paga la productora
-          Después de este viaje me voy a aficionar a viajar en coche –respondió Miles-
-          No te preocupes, en nada estamos ahí. Besos

Antes de que siguiera regañándome como a una niña terminé la llamada y empecé a maquillarme en el coche para allí no tener que retrasar las entrevistas aun mas. Solo necesitaría cambiarme de ropa y ya estaría como nueva.

Miles y yo ya habíamos hablado suficiente sobre lo que decir y no decir sobre nuestra relación, pero siempre habría alguien que nos sorprendería con alguna pregunta incomoda y eso no tardo mucho en ocurrir.

Segunda entrevista, chica rubia, bastante joven, se nos acerca y boom! pregunta sobre Max.

-          Siempre será un buen amigo. No nos vemos como antes pero le adoro y él lo sabe
-          Es un buen chico –continuo diciendo Miles-

Le mire orgullosa y en un intento de que la periodista no me viese le susurre  “Te quiero”. Era de agradecer que Miles después de lo que había pasado con Max aun fuera capaz de decir que era un buen chico.

-          En 5 minutos tenéis otra entrevista. Queréis tomar algo? –pregunto el manager de Miles-

Después de responder mil veces a las mismas preguntas de lo único que tenía ganas era de terminar el trabajo e ir a la habitación del hotel a descansar. Sabía que era difícil no repetir una pregunta después de tantas entrevistas pero al menos una nueva no vendría mal, no podía ser verdad que todos preguntasen lo mismo.

-          Quiero descansar –dije apoyándome sobre el hombro de Miles-Me pasaría la vida en casa de tus padres, con la comida de tu madre, los gritos de Dylan, las risas con Dana… esto es una mierda. Hacemos películas para luego pasar media vida promocionándolas
-          Puedo meterte en una caja y mandarte directa allí
-          Hazlo antes de que venga el siguiente periodista

Siempre era tarde cuando se nos ocurrían las mejores ideas, esta vez solo pude darle un rápido beso  para después sonreír falsamente a cuatro periodistas que entraron a entrevistarnos.

A veces aunque desees mucho una cosa la gente te hace imposible conseguirla, ese era mi caso con Max. Intentaba no pensar en él pero todos los periodistas, sin excepciones, terminaban preguntándome por cómo estaba mi relación con él aun sabiendo que Miles estaba a mi lado. La culpa fue mía por intentar ser agradable y no vetar ninguna pregunta, para otra vez ya sabía qué hacer.

-          Joder cari
-          Perdón, es que no se me va de la cabeza. Parezco su madre… a la cual voy a llamar ahora mismo para tranquilizarme un poco
-          Haz lo que quieras, al final me voy a terminar enfadando

Era normal que se enfadase conmigo, no dejaba de hablar de Max y si yo estuviera en su situación estaría igual. Aun así hice caso a lo que mi corazón me decía y llame a Sinead esperando que me diera alguna buena noticia sobre Max, necesitaba saber que estaba bien.

-          Max me va a matar pero te mereces saber cómo está, después de todo por lo que ha pasado es normal que estés preocupado
-          Aunque estemos separados sabes que lo quiero más que a nadie
-          Lo sé Em. Hablé con el ayer y se le nota más animado desde que Samuel esta allí, han salido de fiesta y no sé qué mil locuras mas habrán hecho
-          Me alegro

Quizás no me alegraba tanto, Max cuando estaba conmigo se comportaba muy bien pero estando soltero podía imaginar las mil chicas a las que se había tirado en una sola noche. Estaba empezando a sentir celos y eso no era buena señal.

Por lo que parecía mis sentimientos por el aun no habían desaparecido, decía que lo quería como a un amigo pero todos sabíamos que unos sentimientos tan fuertes como los que tuve hacia él eran imposibles de desaparecer en unos meses. Pude haberme enamorado de otro hombre pero eso no significaba que Max ya no ocupara un lugar muy importante en mi corazón.

-          Miles no te enfades
-          Deja de preocuparte por él, ya es mayorcito joder! –dijo enfadado- Intento tragarlo por ti pero me pone de los nervios que no dejes de hablar de él a todas horas
-          Lo siento, soy así. Que quieres que le haga?

No sabía comportarme de otra forma. Me preocupaba por la gente aunque intentase no hacerlo, esa era la Emma que había conocido y la Emma con la que tenía que conformarse.

Los siguientes dos días continuamos con la promoción de la película, esta vez ya estaba terminada y en menos de 24 horas teníamos la premiere  en Los Ángeles. Si ya estaba estresada por todo lo que había pasado con Max, aun lo estaría más cuando Cassie no encontrase el vestido que tanto tiempo nos llevo escoger para ponérmelo en la premiere.

-          Dios no… -el despertador estaba sonando y no tenía ganas de apagarlo. Madrugar para ir de compras no era lo mío-  Miles

El pobre aún con el enfado que tenia por culpa de mis llamadas a Max, pasó por encima de mi cuerpo y apago el despertador para después decirme “No vas a ninguna parte” seguido de un dulce beso.

-          Tengo que ir o Cassie me mata

Ese era uno de los inconvenientes de olvidar el vestido en Nueva York. Daba igual que fuera el día del estreno, la actriz protagonista tenía que madrugar e ir a probarse mil vestidos mas para que así su manager la cual se había olvidado el vestido estuviera contenta.

“Recuerdas lo que paso hace un año? Necesito verte”

Ya hacia un año desde que se nos ocurrió la locura de casarnos. Daba igual si estábamos separados o no, me hizo ilusión que se acordara de uno de los días más importantes de nuestras vidas.

“Yo también, echo de menos a mi mejor amigo”

-          Estoy preocupada por él y le echo de menos. Me voy a terminar volviendo loca por su culpa
-          Intenta no pensar en eso y mira lo increíble que estas con este vestido. Casi más que el que teníamos preparado

Era verdad, con lo guapa que estaba en ese vestido no tenia que pensar en otra cosa que no fuera disfrutar de mi primer estreno como actriz protagonista.

6 horas más tarde todo lo que pensé que sería tranquilo se había convertido en lo contrario. Gente por todas partes, policía, miles de fotógrafos… no entendía nada, no podía creer que esa película fuera tan importante.

“Emma aquí por favor” esa misma frase la escuchaba una y otra vez. Los fotógrafos estuvieron haciéndome fotos hasta cuando no posaba, era un autentico caos. Busque al pequeño Charlie y lo agarre bien fuerte antes de que me diese un ataque de nervios y no supiera como posar en la foto grupal que aun no habíamos hecho.

-          Mira –dijo Cassie enseñándome su móvil- Quieres ir?
-          Debería quedarme a ver la película
-          Si quieres, sino puedes irte y ya la veras en casa

Las dos sabíamos que estaba mal que me fuera, pero me tentaba tanto la idea de salir de allí y ver que ocurría que lo hice sin pensarlo dos veces. Con la escusa de que no me encontraba bien Cassie me llevo de vuelta al hotel y en vez de ir a mi habitación me quede en la suya, no podía ser tan tonta como para que alguien fuera a mi habitación y me encontrase con cierta persona.

-         Que haces aquí?
-          Estas preciosa
-          Max…
-          Quería hablar contigo y aclararme de una vez por todas

Lo veía muy difícil, después de lo que acababa de hacer ni siquiera yo misma tenía claro en qué punto estaba nuestra relación. Quería a Miles pero aunque lo intentase con todas mis fuerzas y me repitiera continuamente que ya no le quería, Max seguía rondando por mi cabeza a todas horas.

-          Donde has dejado a Miles?
-          Max que te jodan –respondí de mala manera- Está donde debería estar yo
-          No –negó con la cabeza- tu estas aquí conmigo y deberías saber por qué has decidido eso

No se daba por vencido ni aun sabiendo que le había engañado y estaba saliendo con el mismo chico con el que le engañe. Max siempre terminaba sorprendiéndome y afortunadamente era para bien.

-          No estás enamorada de ese chico. Admítelo, no lo estas
-          Me gusta
-          Exacto te gusta pero no estás enamorada. Nunca vas a enamorarte de alguien si aun lo sigues de mi
-          No se para que he venido, pensé que querías hablar de otra cosa
-          En verdad no quiero hablar. He viajado desde Nueva York a Los Ángeles el día del estreno de tu película solo para besarte

Con sus manos rozando mi cuello deje que me besara mientras intentaba pensar que hacer con él.
Volvía a la situación de engañar a una persona que quería, en cambio esta vez era con alguien con el que había estado casada.

-          Espera, espera…  -lo separe de mi boca y le mire fijamente a los ojos- no puedo estar con ninguno. Esto no está bien 
-          Me quieres?
-          Max por favor no me hagas esto

Con cada palabra que decía su boca volvía a acercarse aun más a la mía y ya me resultaba imposible controlarme. Una cosa era saber que estaba mal lo que hacía y otra muy diferente poder resistirse al hombre que tenía en frente.

-          Em no te vayas -pasó un brazo por delante de mi cuerpo y me paró antes de que saliera de la habitación- Lo que me sobra es tiempo, si me dices que en algún momento cabe la posibilidad de que volvamos a estar juntos te juro que espero lo que haga falta
-          No esperes por nadie

Era la respuesta más sincera que le podía dar, no sabía que estaba pasando en mi vida y hasta que no lo descubriese nada en tendría sentido.

-          Dime que me quieres
-          Te adoro y lo sabes.  Ahora déjame salir por favor

El día que supuestamente tenía que ser inolvidable se convirtió en mi peor pesadilla.
Después de esa conversación con Max no volví a verlo en casi dos años, no puedo decir lo mismo de Miles. Tras pensarlo más de una vez tome la decisión de que no podía engañar mas a una persona a la que quería tanto, lo mejor era terminar la relación y cuando estuviera preparada para tomarme algo en serio quizás volveríamos a intentarlo.

Teníamos una película pendiente juntos pero con mi fuerza de voluntad y la ayuda de Cassie iba a conseguir no volver a caer en sus redes. Estar soltera durante unos meses me iba a venir bien.

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