domingo, 29 de diciembre de 2013

Capitulo 41

-          Y si lo estropeamos?
-          A que te refieres?
-          A la sensación que tengo cada vez que te veo después de un mes. A como me sobresalto cada vez que huelo tu piel. No quiero que eso acabe
-          No lo hará. Lo impediremos

Delante de la puerta de casa sus padres me entro un miedo aterrador, tenia pánico a que al verme de nuevo allí pensaran que solo estaba con su hijo por el interés. Últimamente Max había tenido mucho éxito y seguramente alguien llegaría a esa conclusión, algo que no era para nada cierto.

Tras pensar varias veces si entrar o no me llene de valor y di un golpe a la puerta esperando que alguien abriese lo antes posible. Tanta intriga me estaba matando.

-         Qué diablos…?

Eso mismo pensé yo cuando vi la cara que puso su madre al vernos juntos. Con mucho miedo y la mano de mi novio sujetando mi cintura entré en dentro de la casa esperando que alguien sonriese lo antes posible, Max no contaba.

-          Pero y esto? –pregunto Jeremy-  No se ni de que me sorprendo

Dejó sobre la mesa la botella de vino que traía entre manos y sin mucha dilación me abrazo. No había otra cosa que necesitara más que eso; Jeremy era como un padre para mí.

-          Si le haces daño te las veras conmigo –dijo mirando a Max-
-          Menos mal que te lo has tomado bien, a mama parece que le va a dar un infarto
-          Tu madre está siempre así
-          No sé qué deciros…

Sinead lo decía todo sin abrir la boca. Mientras yo seguía abrazada a su marido temblando de los nervios ella se limitaba a mirar a Max intentando averiguar por qué había vuelto conmigo. Las dos nos llevábamos muy bien pero entendía que se sorprendiera al verme allí después de lo que habíamos vivido.

-          Bueno os dejamos a solas un rato. Me la llevo arriba a colocar las maletas –dijo Max quitándome de los brazos de su padre-

No sabía qué hacer, estaba tan nerviosa por la reacción de su madre que no sé como fui capaz de llegar a la habitación. Max me tranquilizaba diciendo que era normal pero en ese momento solo sabia mirar el lado malo de las cosas.

-          Cariño deja de pensar en esas tonterías. Te quiero mucho
-          Y yo a ti pero esto me sobrepasa, no tenía que haber venido

No pudo darme un beso en mejor momento; sabia que me quería y me apoyaba en todo pero un beso lo demostraba sin palabras. Un beso de Max era mejor que mil palabras.

-          Em cielo estas bien? –preguntó Sinead al entrar a la habitación- Perdón por cómo me he comportado
-          No te preocupes
-          Me ha sorprendido volver a veros juntos pero los dos sabéis que os voy a apoyar siempre. No hace falta que os repita lo mucho que me gustáis felices y no peleando
-          Y a quien no –dijo Max- Mama gracias por la aclaración, ahora déjanos descansar un poco porque al menos yo estoy muerto de cansancio
-          Gracias Sinead –dije antes de darle un abrazo- cuando duerma un poquito seguimos hablando vale? Perdónanos

Tras esas necesitadas palabras por parte de Sinead, me cambie de ropa y me metí a la cama a descansar un poco. Daba igual que en el vuelo hubiese dormido, no era lo mismo las piernas de Max a una cama blandita y caliente.

-          Cógelo tu

Conteste la llamada y después de escuchar lo que me acababa de decir el representante de Max aguante las ganas de gritar y dar saltos por toda la casa. Si yo no era capaz de asimilar lo que me acaban de decir, Max mucho menos. Después de todo el trabajo que había hecho no podían darnos mejor noticia.

-          Que ha pasado?
-          Quieres dormir o estar toda la noche en vela?
-          Dime que ha pasado
-          Tu película está nominada a 3 globos de oro

En ese momento su cara cambio por completo, era una noticia increíble, el mejor regalo que nos podían hacer.

-          Y tú a otro, mejor actor de reparto
-          Me estas gastando una broma
-          Te lo juro

Pasé de estar atacada de los nervios a no poder remediar sonreír al ver a mi novio tan sorprendido.
Tenía hasta miedo, era la primera vez que le nominaban a un premio tan importante y el pobre no sabía qué hacer.

-          Ahora sí que no te separes de mi, va a ser imposible que vuelva a dormir
-          Pero yo puedo?
-          No, tú me vas a hacer compañía –respondió divertido- Claro que puedes cariño

Aunque le dijera que quería dormir, hasta a mí se me hizo imposible. Los Globos de oro significaban un gran paso para los Oscars y si eso llegaba a ocurrir Jeremy dejaría de gastarnos bromas con que él era el único de la familia que lo tenía.

Me gustaba recibir sorpresas de ese tipo pero si me las daban muy a menudo un día iba a sufrir un infarto. Para ser un buen actor había que dormir las horas suficientes y nosotros últimamente no lo estábamos haciendo.

-          Nos vamos a la piscina, por los viejos tiempos
-          Llamo a tu padre?
-          Si quieres –reímos- Si ganas el premio por favor en tu discurso dame las gracias por este momento
-          Diré “Gracias a mi novia por bañarse desnuda conmigo en la piscina de mis padres. Gracias a ella he podido ganar este premio” –volvimos a reír- si lo gano te prometo que lo digo
-          Crees que no lo vas a ganar pero yo no estaría tan seguro. Si te han nominado es por algo
-          Em sabes que es imposible
-          Y también sé que estoy saliendo con un actor idiota

Dentro de la piscina y desnudos tal y como Max había dicho ya daba igual lo muy idiota que pudiese ser. Me iba a divertir un poco con el pero sabía que no me equivocaba al afirmar que él tenia las mismas oportunidades de ganar que los otros candidatos; era un muy buen actor y la gente lo sabía.

A la mañana siguiente…

-          Buenos días
-          Buenos días Emma –respondió Sinead-

Mientras Jeremy leía algo en el móvil con mucho interés me acerque a darle un abrazo de buenos días a la madre de mi novio. Había llegado el momento de volver a ganarme a la familia y no podía perder el tiempo.

-          Algo que contarme? –pregunto Jeremy-
-          Algo como qué?
-          Tu sabrás

Lo conocía tan bien que estaba segura de que acababa de enterarse de que su hijo estaba nominado a un globo de oro.
Sinead parecía no saberlo asique intente aparentar que no sabía nada hasta que Jeremy se atreviese a dar la noticia.

-          Ayer estuvisteis en la piscina y no me invitasteis a ir con vosotros
-          Podría responderte algo fuera de tono pero no lo voy a hacer, todo porque ahora ya no somos amigos
-          A no? Quieres que te trate como a mi nuera?
-          Trátame como quieras

Mas que mi suegro era uno de mis mejores amigos. Todo lo que le pude decir era broma, Jeremy me conocía y sabia que aunque le tratase así era la persona a la que más respeto tenia.

-          Buenos días
-          Ahora entiendo por qué habéis vuelto vosotros dos. Si no fuera porque estoy casado con tu madre te robaba a Emma
-          Lo mismo digo, si no fuera por qué tu padre está casado no estaría contigo –dije mirando a Max- El pobre hombre cada vez va peor de la cabeza

Tanto Sinead como Max rieron al ver la complicidad que tenia con Jeremy. Grabar una película juntos ayudó mucho a entablar una amistad, pero mantener llamadas todas las semanas y tratarlo casi como a un padre lo reforzó todo un poco más.
Por suerte no le molesto que le hubiese mentido sobre mi relación con su hijo y me volvió a recibir con los brazos abiertos. Los padres aceptaban las decisiones de sus hijos por muy locas que fueran y eso fue lo que él hizo.

-          A parte de nuestra noche en la piscina creo que Max tiene algo que contaros si es que aun no os habéis enterado
-          Te lo dejo a ti
-          Max!
-          Ha pasado algo malo? –pregunto Sinead-

Mire a Max y espere a que él lo contase pero al ver que no lo hacia solté la noticia de golpe y al segundo su madre dio un grito que escucharon todos los vecinos. Fue un grito raro, no sabía si lo dio porque estaba contenta o porque quizás odiaba esos premios y le asustaba la idea de que su hijo ganase uno.

-          Ella te hace ganar premios, en serio
-          En algo estamos de acuerdo mama.
-          Callar la boca por dios. Ganas premios porque eres buen actor y punto
-          Ya, pero los gano cuando estoy contigo

Me estaban empezando a asustar con tantas tonterías, al final iba a ser cierto eso de que Jeremy con sus rarezas era el más normal de la familia.

Sinead estaba feliz por la nominación pero Jeremy estaba más que eso, le daba igual que su hijo pudiera robarle el puesto de mejor actor de la familia, estaba tan orgulloso de él que solo podía imaginarse a ese pequeño gran hombre encima del escenario agradeciendo su primer globo de oro de la misma forma que él lo había hecho años atrás.

-          Que no se te suba la tontería a la cabeza, sabes que solo es un premio. Eso no te va a dar de comer

Cuánta razón tenía. Un premio te daba la certeza de que lo que estabas haciendo se te daba bien pero nunca te daba dinero para mantener a tu familia, eso solo se ganaba con muchas horas de trabajo bien hecho.

Tras la noticia alguien que no esperábamos me llamó. Mi madre solía llamarme casi todos los dias pero esta vez no tenia ni idea de que estaba en Londres junto a Max y sus padres; la pobre mujer se iba a llevar la sorpresa de su vida.

-          Estoy con Jeremy y Sinead en Londres
-          De visita?
-          Sí, he venido con Max

La acababa de dejar sin palabras y ya no sabía si eso era bueno o malo, tendría que esperar unos minutos a que se recompusiera de la noticia.

-          Por fin hacéis algo bien. Tengo muchas ganas de veros
-          Íbamos a ir después de esto pero con Max nominado a un globo de oro creo que vamos a tener que volver a Nueva York
-          Que qué? –pregunto sorprendida-
-          Ayer salieron los nominados… -en ese momento Max apareció por la habitación y me dio un beso en la cabeza- … y mi precioso novio está entre ellos
-          Entonces si gana podre decir “Ese es mi yerno!”? –pregunto divertida-
-          Puede mi madre llamarte yerno? –pregunte a Max-
-          No –respondió muy serio-

La familia estaba de nuevo unida y ya hasta las tonterías de Max nos parecían graciosas. Mientras las personas que queríamos nos apoyasen, los demás no tenían que importarnos.
En menos de una semana volveríamos a NY y esta vez no nos íbamos a esconder de nadie, me daba igual los comentarios que pudiesen hacer, estaba preparada para todo.

Durante los cuatro días que estuvimos en Londres nada pudo salir mejor, después de mucho tiempo sin podernos permitir esos momentos por fin podíamos actuar como una pareja normal; ir al supermercado, salir a cenar con los amigos, bailar en mitad de la calle… mil cosas que durante estos años sin él eché mucho de menos.

-          Soy Maya…
-          Y soy superman –continuo diciendo Max-

Su prima de apenas 6 años había venido a casa y Max no dejaba de jugar con ella. Mientras él la lanzaba por los aires haciéndola decir que era superman, tanto yo como los padres de Maya lo grabábamos con la cámara.

-          Soy Maya y soy superwoman –grito mirándome sonriente- Emma!
-          Es divertido a que si?
-          Si

La niña se lo pasaba bomba y nosotros no podíamos dejar de sonreír al verla tan feliz.  Al final iba a ser cierto eso de que un niño siempre es capaz de alegrarte el día, al menos conmigo lo consiguió.

-          Quiero ir con Emma

Cogí a la niña en brazos e intentando hacerla reír aun mas puse en práctica todas las locuras que me gustaba hacer de pequeña.

-          Ya sabéis lo que esperamos para la próxima vez que vengáis –dijo Sinead-

Sabia a lo que se refería pero con mi edad aun no sabía si estaba preparada para ser madre, había demasiadas cosas que me gustaría hacer antes de dar un paso tan importante.

-          Estoy por asegurar que Max ya lo ha pensado más de una vez –dijo su tío-
-          Max esta por la labor a todas horas, la que no lo está soy yo. Darnos un par de años mas
-          Cuando mi esperma se paralice y no podamos darles un nieto a mis padres
-          Emma que es esperma? –pregunto Maya-

Todos menos yo rieron, para ellos era divertido escuchar a Maya preguntándome esas cosas pero para mí no era fácil responderlas.

-          Nada cariño nada, Max solo dice tonterías. Quieres seguir jugando?
-          Si

Aproveche ese momento para huir de la incómoda situación en la que me habían puesto. Me parecía bien que quisiera ser padre pero después de lo que habíamos pasado y que tan solo llevábamos 2 meses juntos me parecía precipitado.

-          Tío Jeremy! –grito emocionada Maya- juega con nosotras
-          A eso he venido. Me estoy acostumbrando a estar con mis dos chicas favoritas y cuando os vayáis os voy a echar de menos
-          Pues no nos vamos. Yo me lo paso muy bien aquí –respondió Maya-

No dije nada pero por cómo le mire ya podía intuir que yo también le iba a echar de menos. Era mi familia y lo raro sería que no lo hiciese.

No hay comentarios:

Publicar un comentario