jueves, 31 de octubre de 2013

capitulo 29

No llegaba a acostumbrarme a ser marido de una gran actriz como era Emma. Con apenas 1 año de carrera y la pequeña de la familia ya acaparaba las portadas de millones de revistas; estar nominada a un Bafta no lo conseguían muchas personas.
Aun con el tema del video a medio arreglar viajamos a Londres. Teníamos un par de días libres y que mejor forma de disfrutarlos que en casa de mi familia. Emma fue la que eligió el destino asique yo no me iba a oponer. 
Ya no tenía mi apartamento pero la casa de mis padres siempre venía bien, tardes en el sofá, noches en la piscina… una semana muy productiva iba a pasar junto a mi mujer.

-          Necesitaba estos momentos. No hay nada que me preocupe

Nada, ella lo había dicho. El vídeo desapareció por completo de nuestras cabezas, todo estaba en manos de la policía pero si por alguna casualidad no eran capaces de solucionarlo creo que tanto a Em como a mí nos iba a dar igual. Estaba seguro de que no éramos la única pareja que lo había hecho.

-          Esto es demasiado –escuche decir a mi madre- como podéis ser tan monos?
-          Estamos enamorados –respondió Emma-

Emma siempre dormía apoyada a mi pecho, muchas veces casi encima mía y eso fue algo que hizo sorprenderse a mi madre. Nunca nos había visto así y menos aun sobre el sofá de su casa.

-          Esta chica ha cambiado tu vida… sois perfectos juntos
-          Verdad? Eso mismo pienso todos los días
-          Que eres perfecto? –pregunto Emma-
-          Tu sí que eres perfecta –reí- Me refería a la primera parte, esa de que has cambiado mi vida

La sonrisa de mi madre lo decía todo, si yo era feliz ella también.

Con Emma encima mía y mi madre haciéndonos compañía, continuamos viendo la película. No tenía ganas ni de salir de casa, todo era tan tranquilo que por momentos me planteaba dejar mi caótica vida y dedicarme a algo normal. Siempre me gusto la idea de ser profesor, era algo que me llenaba incluso más que interpretar a un personaje. No tenia duda de que si mis padres no fueran actores ahora mismo estaría trabajando de ello, el problema era que si mi vida hubiera sido de esa forma nunca habría conocido a Emma. Por una parte ese mundo a veces me venía grande pero otras muchas me daba sorpresas como el encontrar a la mujer de mi vida.

-          Emma con quien vas a ir a recoger el premio? –pregunto mi madre-
-          Es imposible que lo gane
-          Si estas nominada es por algo, no pienses que no vas a ganar. Vais juntos?
-          Me va a abandonar por su nuevo mejor amigo Robert DeNiro –respondí irónico-
-          Me llamo ayer! Que quieres que le diga Max? Vas a venir conmigo pero también con Robert

Una locura andante llego al salón y se lanzo sobre Emma. Buddy ya no era el cachorro de hace 2 meses, cada día crecía un poco y ahora ya era lo suficientemente grande como para molestar encima nuestra.

-         QUE????????? –empezó a gritar Emma- Gracias Cassie, gracias!

No entendía nada, o terminaba la llamada y me decía que pasaba o me volvía loco.

-          Tengo el papel!!!!!!!!! Max!!!!!!

Buddy al suelo, Emma saltando encima del sofá… todo era una autentica locura.

-          Scott Hicks ha llamado personalmente a Cassie para darme el papel

Nada de lo que pudiera decirla le iba a hacer más feliz. Había conseguido su primer papel protagonista en una película con bastante presupuesto y Emma era la persona más feliz del mundo. No era una película de culto pero seguramente gracias a ella iba a ganar muchos fans, los cuales harían que trabajase en muchas más películas.

-          Soy muy feliz por ti –le di un beso- 

En menos de dos segundos paso de celebrar la noticia conmigo a ir a abrazar a mi madre llorando. La veía tan contenta que contagiaba esa felicidad a todos los que la rodeábamos, era increíble verla tan bien después de los problemas que tuvimos.

La escasa semana de vacaciones que íbamos a pasar en Londres no serviría de mucho cuando volviésemos a Nueva York con más proyectos que nunca. Yo apenas tenía un par de entrevistas que hacer pero Emma estaba a rebosar; aun no entendía como Cassie había sido capaz de organizar todo tan milimétricamente para que le diese tiempo a hacer todas esas cosas. O cuidaba muy bien de mi mujer o la pobre se moría en el intento.

Mientras Emma y mi madre pasaban las tardes en busca de un vestido que llevar a la entrega de premios, yo pasaba las mías encerrado en casa jugando a videojuegos junto a James y Kevin. Me encantaba Londres pero esos días no tenía ganas de nada, ni siquiera de moverme del sofá.
--------------------------------------------------

POV Emma

(5 meses después) 4 de septiembre, Los Ángeles

Nada era comparado con lo que estaba viviendo, ni siquiera el poder asistir a una entrega de premios junto a Robert DeNiro lo superaba. Después de mucho tiempo alguien era capaz de hacerme sonreír con tan solo una mirada, solo con eso, sin ni siquiera una palabra nos entendíamos a la perfección.

Max se quedo viviendo conmigo durante el rodaje de la película en Los Ángeles y era algo de agradecer. Era la película en la que mas tenía que trabajar y tener al lado a alguien que me apoyaba era lo mejor que me podía ocurrir.

-          Tu marido me pone nervioso

Zac tenía razón; si tenía que besar a otra persona que no era Max y de una forma muy apasionada lo mejor era que mi marido se fuera de allí.

-          Piensa que no está. Para media hora que os queda no le voy a decir que se vaya –dijo Cassie-
-          Ponte en mi situación
-          Me pongo y solo sé que le vas a comer la boca a ese monumento de ahí asique disfrútalo y no pienses en nadie

Si no pensaba en nadie iba a desmelenarme y no era plan. Zac era un chico guapísimo y muy agradable pero mi cabeza tenía que estar con Max y solo con él.

-          Zac con más pasión!

Zac empezó a besarme más fuerte, yo hice lo mismo y al final todo se descontrolo.
A veces la interpretación pasaba a ser más que eso y ese fue mi caso, no besaba a un personaje, lo besaba a él. 
Se me fue de las manos, ya no sabía ni como volver a mirar a Max.

-          Otra vez –dijo el director-

Las miradas hablaban por si solas, los dos estábamos cómodos dentro de la incomodidad y eso era muy raro. No entendía que me estaba pasando.

-          Estas bien? –pregunto apartando un mechón de pelo de mi cara-
-          Sí, tengo tu saliva por todas partes pero estoy bien –respondí intentando mejorar el ambiente- estas cómodo haciendo esto?
-          Más de lo que esperaba

La tensión se palpaba, todos nos estaban mirando y si eran un poco listos podían ver como lo que estábamos haciendo ya no era una simple actuación.

-          Te lo has pasado bien no? –pregunto Max muy serio-
-          Era parte de la película
-          Lo dudo mucho

Enfadado y sin decirme una palabra más recogió sus cosas y salió del estudio de rodaje. Si lo que quería era hacer daño a la persona que mas quería lo había hecho demasiado bien.

-          Emma espera –escuche decir a Zac- Lo siento, no sé si has discutido con Max o qué pero lo siento mucho si le ha molestado algo
-          Tranquilo he sido yo, mañana nos vemos

Antes de que me fuera y de una forma muy dulce me dijo lo que tanto deseaba escuchar “Si me necesitas para lo que sea sabes dónde estoy. No te preocupes”. Necesitaba saber que alguien me apoyaba después de lo que había pasado, Max no podía ponerse así por algo que no tenía ni el mas mínimo sentido.

-          Estabas disfrutando del beso, no interpretabas ningún papel. No me mientas Emma
-          No te estoy mintiendo
-          Júrame que no has sentido nada

No podía, aunque le dijera que no me había gustado el beso lo había hecho. A cualquier mujer le agradaba besar a un chico tan guapo, era normal, no por eso tenía que empezar a tener sentimientos por Zac.

-          Le gustas

Ya no sabía que decirle para que confiara en mi, creo que ni yo misma lo hacía y eso era lo que más me preocupaba. Todas las inseguridades que no tuve a la hora de casarme con Max acabañan de aparecer, en ese momento me empezaba a dar cuenta de la locura que había hecho.

Llamar a Sara o a Sofía en otro momento hubiese sido lo ideal, en cambio en ese no lo era. Cassie era la única que sabia como ayudarme, sin miedo a que me pareciera mal o bien tenía que decirme la verdad, necesitaba saber qué hacer con mi vida.

-          Estoy enamorada de Max, lo adoro. Lo que no entiendo es porque me pasa esto ahora
-          Recuerdas el momento en el que hiciste el casting con Zac? Ahí tienes la respuesta
-          Dímela porque no la se
-          Tenéis mucha química. No sé si lo que tenéis ahora es un calentón o qué pero los dos estáis embobados el uno con el otro. Tienes que tener muy claros tus sentimientos por Max si no quieres hacerle daño

No ayudaba nada, solo conseguía liar mas mi cabeza. Qué iba a hacer daño a Max ya lo sabía antes de que me lo dijera, lo que necesitaba era la clave para sobrepasar eso sin que nadie lo pasara mal.

-          No voy a ir al apartamento. Necesito estar sola y aclararme, como mañana siga así en la película me van a mandar a la maldita calle

Pase una diadema por mi pelo, cogí el bolso y salí de allí lo antes posible. No tenía ni idea de a donde ir pero sabía que con Max por el momento no podía volver. Igual lo que necesitaba era pasar toda la noche encerrada en el coche dando vueltas por Los Ángeles, seguramente eso me ayudase a decidir qué hacer. Mi cabeza por una parte me decía quédate con Max y mi corazón… mi corazón ni yo misma lograba entenderlo; no podía ser posible estar enamorada de una persona y desear con todas tus fuerzas a otra.

-          Creo que me he perdido
-          Ya veo tu coche. La casa que tienes justo a la izquierda es la mía, ahora abro

Una gran verja se abrió frente al coche y de esa forma conseguí conducir hasta una preciosa casa en las colinas de Hollywood. Era algo completamente diferente a mi apartamento de Nueva York pero era muy bonito, perfecto para pasar una noche allí.

-          Lo siento mucho, es tardísimo

Esa vez no entendía lo que quería decirme con la mirada, parecía que le daba pena y eso era algo que odiaba.

-          Estas casada de verdad?
-          8 meses
-          Deberíamos ir a dormir. Mañana tenemos trabajo

Tanto para él como para mí el ambiente se había vuelto demasiado incomodo, le agradecía que me dejara quedar allí pero cuanto más separados estuviéramos mejor. 
Zac se había convertido en mi único punto de seguridad en la ciudad, todo mi mundo volvía a desmoronarse y aunque en ese momento nuestra situación era muy incómoda sabia que siempre lo tendría a mi lado para lo que necesitara.

-          Buenas noches

Antes de que me diera tiempo a responderle ya lo tenía delante de mi cuerpo a punto de darme un beso en la frente, de esa forma dejaba claras cuáles eran sus intenciones y lo que no quería que sucediera. Zac era más listo de lo que me esperaba, sabía que no podía dejar que una niña de 20 años se enamorase de él.

-          Duerme conmigo –dijo cogiéndome de la mano- me da igual tu marido. Solo vamos a dormir

A eso fue a lo que fui hasta su casa, me daba igual si lo hacía con él o sola, necesitaba dormir al menos un par de horas antes de pasar más de 6 horas grabando.

-          Puedes pegar ojo? –pregunte mirando al techo-

Llevaba casi una hora en la cama y se me hacia imposible dormir, nada salía como quería, ni siquiera el dormir.

-          Ven –dijo rodeándome con su brazo- piensa solo en ti, olvídate de los problemas. Quieres que te cante una nana?

Como quien no quería la cosa terminamos cantando una estúpida nana mientras seguíamos tumbados en la cama. No sé si de esa forma conseguiría dormir pero al menos había conseguido tranquilizarme un poco.

4 horas más tarde ya estábamos en pie e intentando desayunar un poco antes de ir a grabar. Actores fuertes y sanos, actores que duran más grabando, al menos eso decía Zac, una estupidez que solo el creía. Una taza de café junto a una manzana fue exactamente lo que tome, Zac a diferencia empezó a sacar mil cosas de la nevera, era imposible que en ese cuerpo entrase tanta comida.

-          Acabo de veros llegando juntos? –pregunto el director-
-          No pienses mal –respondí antes de que se imaginara algo que no era- No me apetecía ir a mi apartamento. Es un buen amigo
-          Debería ser un buen amante, ya sabéis que os toca hoy

Por fin dejábamos a un lado los momentos pasionales y nos dedicábamos a momentos románticos.
La película iba a ser increíble, con suerte conseguiríamos que se convirtiera en uno de esos éxitos que los adolescentes y las mujeres románticas ven cuando se sienten deprimidos, una autentica película de amor.

En la playa me encontré con la sorpresa de que Max no iba ir ese día a verme grabar, Cassie había hablado con él y entre lo que había pasado la noche anterior y que yo no había ido a dormir al apartamento Max se planteaba volver a Nueva York.
Mi idea era llamarlo para intentar hacerle cambiar de opinión pero cuantas más veces lo pensaba menos sentido le encontraba. Después de mucho tiempo no sentía la necesidad de tenerle a mi lado continuamente, por fin parecía que era la chica independiente que siempre quise ser.

-          Zac… que hacemos?
-          No lo sé –respondió besando mi cuello-

-          CORTEN! Emma has dicho Zac, y Zac contrólate que parece que estáis haciendo la escena de ayer. Mas amor y menos pasión


Los nervios se estaban apoderando de mi, faltaba nada para que se me olvidase de mis frases y eso era por culpa de Zac. Si teníamos que grabar un beso tumbados en la arena de la playa lo que no podía hacer era empezar metiendo su mano bajo mi camiseta y terminar con un beso aun más fuerte que el de la noche anterior; con eso solo conseguía hacerme decir estupideces.

No hay comentarios:

Publicar un comentario